COC Centro Oncológico de Chihuahua

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¿Qué es el Cáncer Colorrectal?

El cáncer se origina cuando las células en el cuerpo comienzan a crecer en forma descontrolada. El cáncer colorrectal es el que se origina en el colon o el recto. A estos cánceres también se les puede llamar cáncer de colon o cáncer de recto (rectal) dependiendo del lugar donde se originen. El cáncer de colon y el cáncer de recto a menudo se agrupan porque tienen muchas características comunes.

La mayoría de los cánceres colorrectales comienza como un crecimiento en el revestimiento interno del colon o del recto. Estos crecimientos son referidos como pólipos.

Algunos tipos de pólipos pueden convertirse en cáncer con el paso del tiempo (por lo general muchos años), pero no todos los pólipos se convierten en cáncer. La probabilidad de que un pólipo se vuelva canceroso depende del tipo de pólipo. Los dos tipos principales de pólipos son:

  • Pólipos adenomatosos (adenomas): estos pólipos algunas veces se transforman en cáncer. Debido a esto, los adenomas se denominan afecciones precancerosas.
  • Pólipos inflamatorios y pólipos hiperplásicos: estos pólipos son más frecuentes, pero en general no son precancerosos.

Entre otros factores que pueden hacer que un pólipo sea propenso a contener cáncer o que aumenten el riesgo de que una persona llegue a tener cáncer colorrectal se incluye:

  • Si se descubre un pólipo mayor a un centímetro.
  • Si se descubre que hay más de dos pólipos.
  • Si después de la extirpación de un pólipo se descubre la presencia de displasia, la cual es otra afección precancerosa. Esto implica la existencia de un área del pólipo o del revestimiento del colon o del recto en el que las células tienen un aspecto anormal, pero sin llegar a tener la apariencia de células cancerosas verdaderas.

Para poder comprender mejor el cáncer colorrectal, es importante saber cómo está compuesto.

El colon y el recto conforman el intestino grueso, el cual forma parte del sistema digestivo, referido también como sistema gastrointestinal.

 

La mayor parte del intestino grueso está compuesto por el colon, el cual es un conducto muscular de aproximadamente 1.5 m. Las partes del colon se dividen y tienen diferentes nombres según la dirección en la que se desplazan los alimentos a través de ellas, comenzamos por:

  • Colon ascendente: Comienza con una bolsa llamada ciego, adonde llega el alimento no digerido desde el intestino delgado. Se extiende hacia arriba sobre el costado derecho del abdomen.
  • Colon transverso: Se extiende a través del cuerpo desde el lado derecho hacia el lado izquierdo.
  • Colon descendente: ya que desciende (se dirige hacia abajo) en el lado izquierdo.
  • Colon sigmoide: debido a su forma en «S». El colon sigmoide se une al recto, el cual conecta con el ano.

Las partes ascendente y transversa del colon en conjunto son referidas como colon proximal.

Mientras que las secciones descendente y sigmoide del colon en conjunto son referidas como colon distal.

  • Cáncer colorrectal en México

    En México, el cáncer colorrectal (CCR) es una enfermedad que afecta de manera seria a la población; este padecimiento ocupa el tercer lugar en incidencia, pero el primer lugar de mortalidad entre los cánceres, por encima del cáncer de próstata y mama. De acuerdo a la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer, perteneciente a la Organización Mundial de la Salud (OMS) de los 14,900 casos registrados en 2018, murieron aproximadamente el 48% de los pacientes diagnosticados.

    En el año 2017 hubo 85,201 muertes por cáncer colorrectal en México, con una tasa global estimada de 6,506 casos por 100,000 (5.24%), 10.7% en hombres y 5.5% en mujeres.

    Los Estados con mayor tasa de defunciones fueron Ciudad de México (7.24%), Nuevo León (6.71%), Baja California (6.26%), Baja California Sur (6.2%) y Chihuahua (6.2%). La tasa de mortalidad por 105 habitantes y grupo de edad ha aumentado en los últimos años; en el 2017 en personas de 49 años o menores fue del 1.06% y en personas de 50 años o mayores, del 22.03%

    Cáncer colorrectal en América Latina.

    Se estima que en todo el mundo se diagnostican más de un millón de personas por año con esta patología y alrededor de 608 mil mueren debido a él. En Latinoamérica ocupa el cuarto lugar entre los cánceres más frecuentemente diagnosticados entre los hombres y el tercer lugar entre las mujeres. A pesar de ello aún no parece recibir la suficiente atención.

    Se pronostica que el incremento en su tasa de incidencia en América Latina no cesará, principalmente a causa del estándar de vida de las personas (un estilo de vida más sedentario y hábitos de alimentación no saludables). El envejecimiento de la población también tendrá un papel a desempeñar en el aumento de las tasas de incidencia, estimándose que más de 100 millones de personas mayores de 60 años estarán vivas en América Latina y el Caribe para el año 2020, lo cual favorecerá la aparición de más casos.

    Muchos factores se interponen en el diagnóstico precoz y el tratamiento a tiempo del cáncer colorrectal en Latinoamérica, incluyendo la relativa falta de especialistas y una infraestructura aún insuficiente del sistema de salud. La infraestructura actual, en muchas zonas de Latinoamérica, a menudo carece de la capacidad para ofrecer tamizaje, quimioterapia y cirugía para todos los pacientes de manera oportuna.

    Cáncer colorrectal a nivel mundial.

    El cáncer colorrectal es una patología cosmopolita, con una incidencia anual de aproximadamente 1,000,000 de casos y una mortalidad de más de 500,000.

    Las tasas de incidencia del cáncer colorrectal más altas se encuentran en Estados Unidos, los países de Europa Occidental, Australia y Nueva Zelanda; en promedio hay 45 casos por cada 100,000 habitantes, mientras que en Asia y África la tasa anual es de 10 casos por cada 100,000 habitantes. A nivel mundial es el cuarto tipo de cáncer más común.

    Las guías de tamizaje son el uso de una prueba sencilla en una población saludable, para identificar a aquellos individuos que tienen alguna patología, pero que todavía no presentan síntomas. Dado a que el cáncer colorrectal se puede detectar en etapas tempranas, pues se origina a partir de lesiones precursoras no malignas, este se puede identificar mediante programas de tamizaje de base poblacional. Aunque las guías de tamizaje para cáncer colorrectal varían en cada país, la recomendación general es empezar el tamizaje en la población de riesgo medio, a partir de los 50 años y continuar a intervalos regulares hasta los 75 años. Las pruebas de tamizaje disponibles para cáncer colorrectal incluyen el examen de sangre oculta en las heces, la sigmoidoscopia y la colonoscopia. 

    Síntomas

    Generalmente aparecen en etapas avanzadas, por lo que es muy importante estar atento a ellos.

    • Cambios en la defecación por varios días.
      • Diarrea que va y viene.
      • Estreñimiento.
      • Heces más delgadas.
    • Sangrado rectal, heces oscuras, sangre en las heces fecales o en el papel sanitario.
    • Cólicos o dolor abdominal.
    • Debilidad y cansancio.
    • Sensación persistente de necesidad de defecar que no desaparece después de hacerlo.
    • Pérdida inexplicable de peso.

    Si tienes alguno de estos síntomas constantemente o por tiempo prolongado (meses), no te auto mediques y visita al médico para conocer la causa y el tratamiento.

    Tratamiento para el cáncer colorrectal.

    Cirugía: Una operación en la que los médicos cortan el tejido con cáncer.

    Quimioterapia: Se usan medicamentos especiales para reducir o matar las células cancerosas. Estos medicamentos pueden ser pastillas que se toman o medicamentos que se inyectan en las venas, o a veces ambos.

    Radioterapia: Se usan rayos de alta energía (similares a los rayos X) para matar las células cancerosas.

    Inmunoterapia: Se usan medicinas para ayudar al sistema inmunitario de una persona para que reconozca y destruya las células cancerosas más eficazmente.

    Da click para más información sobre los tratamientos para el cáncer que brindamos en el Centro Oncológico de Chihuahua.